Afectada por la reciente prohibición de exportación de productos de antimonio impuesta por el gobierno chino, los datos de la Aduana china muestran que las exportaciones de productos de antimonio en octubre de 2024 se desplomaron un sorprendente 97 % con respecto a septiembre, pasando de 6 533 toneladas a solo 190 toneladas. Esta caída no solo supera con creces las 4 034 toneladas del mismo período del a?o pasado, sino que también sitúa el volumen total de exportaciones de productos de antimonio de China en los primeros diez meses del a?o en 36 103 toneladas, un descenso interanual del 17,2 %. Estos datos ponen de relieve el profundo impacto de las políticas de control de exportaciones tanto en la industria del antimonio de China como en el mercado global.

Según Reuters, debido a la preocupación en el mercado de que Pekín endurecerá aún más las restricciones a las exportaciones, entre agosto y septiembre se desató en el extranjero una ola de acaparamiento que provocó un repunte abrupto de las ventas al exterior. Sin embargo, una vez que la prohibición de exportación entró oficialmente en vigor, las empresas se vieron obligadas a reducir sus envíos al exterior y aumentar el suministro interno, lo que presionó a la baja los precios al contado. El Ministerio de Comercio de China anunció el 15 de agosto que, a partir del 15 de septiembre, se impondrán controles a la exportación de materiales estratégicos como el antimonio; las autoridades afirmaron que la medida es una práctica común a nivel internacional y busca salvaguardar mejor la seguridad nacional y cumplir con las obligaciones internacionales de no proliferación.

El antimonio, como metal estratégico, se utiliza ampliamente en el ámbito militar, como en municiones, misiles infrarrojos, armas nucleares y dispositivos de visión nocturna, así como en baterías yfotovoltaicoAplicaciones en equipos. China, como el mayor productor mundial de antimonio, representó el 48 % de la producción minera global el a?o pasado y desempe?a un papel crucial en la cadena de suministro mundial. Sin embargo, la implementación de controles de exportación provocó una caída drástica en los volúmenes exportados, lo que refleja el impacto directo de la política en la cadena industrial.

Los analistas se?alan que la prohibición de exportación obliga a los exportadores a solicitar licencias para artículos y tecnologías de doble uso, que pueden emplearse tanto con fines militares como civiles. Debido a que el proceso de solicitud es complejo y requiere tiempo, parte de la carga se ha quedado en el mercado interno, aumentando la oferta nacional y presionando aún más a la baja los precios al contado. Según datos de Shanghai Metals Market, el precio al contado del antimonio en lingotes en China cayó un 7,5 % en octubre y, desde que Pekín anunció la prohibición de exportación el 15 de agosto, ha acumulado una baja del 11,5 %, cerrando el 19 de noviembre en 141.000 yuanes por tonelada (aproximadamente 26.000 dólares singapurenses).

En marcado contraste con la caída de los precios del antimonio en el mercado chino, el mercado europeo ha experimentado un fuerte repunte en el precio del lingote de antimonio debido al ajuste en la oferta. Cristina Belda, analista del servicio de información Argus, se?aló que impulsados por las nuevas medidas de control de exportación de China y la escasez global de suministro, los precios del antimonio en Europa y Estados Unidos superaron en octubre la barrera de los 30,000 dólares por tonelada, alcanzando un máximo histórico. Actualmente, los inventarios globales de antimonio en almacenes se encuentran en un nivel de extrema tensión, lo que ha elevado aún más los precios de mercado.

Belda se?aló que, para los comerciantes occidentales, los riesgos del comercio de antimonio se vuelven cada vez más difíciles de manejar. “Los canales de suministro se han vuelto menos confiables y no está claro cómo pueden los compradores occidentales mejorar esta situación”, agregó. Esta situación no solo ha intensificado la incertidumbre en el mercado global del antimonio, sino que también ha resaltado aún más la importancia del antimonio como metal estratégico.

Además, la prohibición de exportación de antimonio también ha tenido un impacto significativo en el mercado interno de China. Debido a las restricciones a las exportaciones, la oferta en el mercado interno aumentó y el precio al contado del lingote de antimonio cayó bajo presión. Los exportadores deben solicitar licencias de exportación bajo una supervisión estricta, y cualquier carga que no obtenga la aprobación a tiempo tendrá que quedarse en el país, lo que provoca una mayor caída de precios. Al mismo tiempo, el aumento de la demanda interna también impone mayores exigencias a la gestión de la cadena de suministro; las empresas necesitan satisfacer la demanda del mercado interno mientras buscan vías de exportación legales y conformes a la normativa.

Cabe destacar que, aunque las exportaciones de antimonio de China han disminuido drásticamente, la demanda interna sigue siendo sólida. Con el desarrollo continuo de los sectores tecnológico y de defensa, la demanda de antimonio se mantiene en niveles elevados. Esta demanda, combinada con las restricciones a las exportaciones, ha creado una situación de tensión entre la oferta y la demanda en el mercado interno, lo que a su vez ha influido en la volatilidad del precio de los productos de antimonio.

A nivel mundial, el impacto de la prohibición de exportación de antimonio de China es particularmente notable. Europa y Estados Unidos, como principales mercados importadores de antimonio, enfrentan una doble presión por la escasez de suministro y el aumento de precios. Especialmente en los sectores militar y de alta tecnología, la creciente demanda de productos de antimonio de alta calidad convierte la estabilidad de la cadena de suministro en un problema clave. Con el ascenso del precio del antimonio, sectores de alto consumo en Europa como la industria farmacéutica, automotriz y química sufrirán un impacto directo, lo que no solo incrementará los costos de producción, sino que también podría provocar un alza en los precios de los productos relacionados, afectando la competitividad en el mercado.

Ante este desafío, los países y empresas occidentales necesitan encontrar nuevos canales de suministro para asegurar un abastecimiento estable de antimonio. Algunos países podrían incrementar el desarrollo de sus recursos mineros de antimonio o buscar cooperación con otras naciones productoras para compensar el déficit de suministro procedente de China. Al mismo tiempo, las empresas deben optimizar la gestión de su cadena de suministro y mejorar la eficiencia en el uso de recursos para enfrentar los riesgos de volatilidad del mercado e incertidumbre en el abastecimiento.

La política de control de exportaciones del gobierno chino no solo busca salvaguardar la seguridad nacional y cumplir con las obligaciones internacionales de no proliferación, sino que también refleja una estratégica disposición de China en la gestión global de recursos estratégicos. Al controlar la exportación de metales estratégicos como el antimonio, China puede garantizar el desarrollo estable de sus industrias nacionales y ejercer una mayor influencia en la escena internacional. Sin embargo, esta política también debe equilibrar la demanda de los mercados interno y externo para evitar un impacto negativo excesivo en las relaciones comerciales internacionales.

En conjunto, la prohibición de exportación de productos de antimonio de China ha tenido un impacto profundo tanto en los mercados nacionales como en los extranjeros. La drástica caída en las exportaciones y la volatilidad de los precios al contado no solo han afectado a las empresas exportadoras chinas y a la cadena de suministro global, sino que también han planteado desafíos para la estabilidad de los precios y el desarrollo de la industria en el mercado internacional. En el futuro, con la implementación adicional de la política y el ajuste gradual del mercado, la relación entre oferta y demanda del antimonio y la tendencia de sus precios seguirán siendo altamente sensibles, lo que merece la atención y la respuesta continuas de todas las partes.