La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos inició recientemente una investigación del artículo 301 contra los sectores marítimo, logístico y de construcción naval de China, lo que ha generado atención y debate en la comunidad internacional. El 21 de este mes, el Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional respondió que la investigación estadounidense es “sin fundamento ni evidencia” y anunció que China se defenderá por vía legal, declaración que constituye una respuesta directa a la acción de Washington.

Los cinco principales sindicatos estadounidenses presentaron el 12 de marzo de este a?o una solicitud de investigación ante la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos, argumentando que el dominio de China en los sectores mundial de construcción naval, marítimo y logístico se basa en políticas no de mercado. Posteriormente, el 17 de abril, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos anunció formalmente el inicio de una investigación 301 con el objetivo de examinar si las conductas, políticas y prácticas de China en estos sectores obstaculizan la competencia justa.

La queja presentada por los sindicatos estadounidenses menciona que los barcos fabricados en China deberían estar sujetos a tarifas portuarias y sugiere utilizar esos ingresos para crear un fondo destinado a revitalizar la industria naval estadounidense. Esta propuesta busca, evidentemente, proteger los intereses del sector naval estadounidense al limitar la ventaja competitiva de los barcos chinos.

El portavoz del CCPIT enfatizó en su respuesta que el auge de la industria de construcción naval de China y el declive de la industria de construcción naval de Estados Unidos no guardan una relación causal directa. El CCPIT insta a la parte estadounidense a respetar las leyes del mercado y los principios de competencia justa, a poner inmediatamente fin a la investigación 301 en curso y a regresar al sistema multilateral de comercio basado en reglas.

Además del sector naval, la Representante Comercial de EE. UU., Katherine Tai, mencionó en su discurso del 19 de abril que el gobierno estadounidense está revisando los aranceles adicionales sobre más de 300 mil millones de dólares en importaciones provenientes de China y que se espera una conclusión pronto. Tai también se?aló que el exceso de capacidad en las industrias siderúrgica y del aluminio de China representa una amenaza para Estados Unidos, lo que indica que Washington podría adoptar medidas más enérgicas para enfrentar este desafío.

El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, declaró en la conferencia de prensa del 18 de abril que el gobierno chino ha exigido constantemente a Estados Unidos que respete las normas del comercio internacional y el principio de competencia justa, y que ponga fin de inmediato a las medidas proteccionistas comerciales dirigidas contra China. Lin Jian subrayó que China adoptará todas las medidas necesarias para salvaguardar sus derechos e intereses legítimos.

Esta serie de eventos demuestra que la fricción entre China y Estados Unidos en materia de comercio y política económica se está intensificando. Estados Unidos intenta proteger sus industrias nacionales mediante medidas como el inicio de investigaciones bajo la Sección 301, mientras que China responde a las acciones estadounidenses por vía legal y a través de la cooperación internacional. Esta disputa comercial no solo involucra los intereses económicos de las dos grandes potencias mundiales, sino que también podría tener un impacto profundo en el entorno comercial global.